El lado roto de ser una romántica empedernida.
Hoy en día estoy en mis 20’s y cada interacción romántica que he tenido ha fracasado, no por falta de intentos ni de luchas constantes en donde he dejado mi sangre, sudor y lágrimas para que sobrevivieran, si no porque de tanto anhelar una relación quizá y solo quizá he forzado las cosas hasta el punto de no enamorarme de mi compañero si no de la idea del amor.
Lo cierto es que soy una romántica empedernida, mis películas favoritas son comedias románticas baratas de los 2000’s, me encanta leer y el único género que leo es el romance, me gustan las canciones que hablan de de ese amor puro que te vuelve loca y te hace sentir mariposas constantes en el estómago. Y a pesar de que estoy enamorada del amor nunca lo he vivido, nunca he amado a alguien al punto de aprenderme sus lunares de memoria, nunca he extrañado su perfume, nunca he sido la prioridad de alguien ni tampoco la razón de sonreír.
Me encanta mi soledad pero el domingo en la noche quiero sentarme a ver una película con alguien, me encanta tener música secreta que solo escucho estando sola pero quiero compartir con alguien la letra de esa canción que está en bucle en mi cabeza, me gusta pasar horas leyendo en la quietud de mi habitación pero quiero contarle a alguien la trama de la historia boba que me tiene enganchada, me gusta hablar por horas pero quiero quedarme callada mientras me cuenta cómo fue su día observando ese brillo en sus ojos.
¿Y sabes qué es lo triste? Que mientras escribía eso nadie se vino a mi cabeza, porque no estoy enamorada de nadie ni nunca lo he estado, solo quiero una relación en la que pueda experimentar el amor más puro, y tal vez ese es mi problema, que me engancho tanto en la meta que olvido por completo que el camino es igual de importante.
Romantizar el amor y una relación que nunca he tenido me ha llevado a llorar durante interminables noches porque he estado dispuesta a perdonar cosas con la excusa que nada es tan fácil y que si logramos superar errores es porque valdremos la pena. Cuando he terminado mis relaciones no he llorado por la persona, he llorado porque he perdido una vez más la oportunidad de tener ese amor de película.
En este punto de mi vida ya hice las pases con el hecho de que tal vez y solo tal vez esa persona que no tiene rostro y de la cual su sombra solo vive en mi cabeza, no existe. Y tal vez nunca ame por completo a mis siguientes parejas, porque sin duda enamorarte de la idea del amor es un arma que puede arruinarte por completo.
Hablo estando en la misma situación. Creo que nuestra idea del amor (además de ser idealizada) es como planificar nuestro día. A la hora de afrontarlo no es tan ideal ni tan pacífico de seda como lo hemos imaginado. Hablo sin haber experimentado el tocar, mirar y amar a un otro. Creo que también me da temor salir del sueño, pero a la vez me gustaría despertar y permitirme conocer.
Gracias por lo compartido <3
Creo que como sociedad, tenemos idealizado el amor, tanto que, quienes creceremos anhelando amar profunda y apasionadamente a alguien, al no tener eso se nos presentan tantas dificultades. Puede ser por falta de afecto en nuestra infancia, que tengamos miedo a que algo malo suceda, que perdonemos demasiado hasta el punto de permitir humillaciones y decepciones; en fin pueden y podrían ser tantas las razones del por qué queremos ser amados o se nos dificulta encontrar esa media naranja de la que tantos hablan. No diré que no es que no exista la media naranja, en un universo tan grande, debe existir al menos una persona con la que podamos conectar. Pero últimamente me he planteado algo, quizás esperamos un amor perfecto cuando no tiene que ser así. No se trata de que permitamos abusos, pero si de perdonar y entender los cambios en la vida. Por más que nos duela a veces alguien está mejor con otra persona que con uno mismo, y eso está bien. Forma parte de la vida ambos soltar y aferrarnos. Aún así, sigo aferrada a encontrar un amor como siempre lo he deseado, pero quien sabe si existe o no, si llegará o no. Mientras tanto, no puedo hacer nada más que seguir viendo con la duda…